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El gobierno de Aldo Macías indiferente ante la desintegración de agrupaciones culturales
Uruapan, Mich., 9 de abril de 2012.- Es lamentable para el círculo cultural de Uruapan conocer los comentarios vertidos por el profesor Ramón Guzmán Ramos, reconocido escritor, periodista, Premio Nacional de Poesía y ensayista, a quien leemos con placer en la editorial de La Opinión de Michoacán, tras anunciar, el pasado 2 de abril, en ese medio, que el grupo del taller cultural que lideraba “Ambrosía” desde hace años, ha dejado de funcionar como tal al definir en sus propias palabras que “el Taller ha cumplido su tiempo. No hay más que decir”. Este anunciamiento pone en tela de juicio la posición del gobierno local de Aldo Macías, en su papel para el fomento a la cultura y las artes en nuestro municipio; pues bien es sabido por todos que los integrantes de “Ambrosía”, con todo respeto y disposición de acercarse a las autoridades representantes de este sector, hace unas semanas, previo al Foro de Cultura, fueron a entrevistarse con las nuevas autoridades correspondientes, entregándoles una memoria de trabajo y parte de su obra, y con el fin de establecer convenios de trabajo y apoyo para dar continuidad a su misión, que es sin duda, en palabras del profesor Ramos Guzmán “cultivar la conciencia y enriquecerla con nuevas formas de ver y concebir el mundo”, o sea darle mayor importancia a la literatura en Uruapan, a través de un grupo independiente y autogestivo, que para sus actividades tan solo requería del apoyo institucional para la facilitación de espacios físicos; pues, como siempre, difícilmente se destina algún recurso del gobierno en turno para que abreve la cultura en este bello edén, creyendo que lo que se hace es un favor. La decisión de Guzmán Ramos es, sin duda, una respuesta a la insensibilidad mostrada por el gobierno de la presente administración; pues al ver la desatención e indiferencia, prefirieron dar por concluida su primera etapa de vida en el ambiente cultural de este municipio, para futuros proyectos. Por el espacio que nos otorga este medio, no podemos hablar de la gran trascendencia que tuvo “Ambrosía” en sus nueve años de lucha y perseverancia cultural, tan sólo decir que tuvieron la valentía y el corazón para que vinieran a sus encuentros literarios escritores de la talla de Carlos Monsiváis y que a su proyecto se llegaran a sumar y participar al menos dos centenares de escritores, poetas, periodistas y amantes de las letras. Esto habrá de extrañarse, con toda sinceridad. La presente situación significa esencialmente lo que podemos predecir como un síntoma sobre las actividades culturales que tendremos bajo el gobierno de Macías Alejandres y sus colaboradores cercanos, pues si lejos de querer dar buena imagen a la ciudad que sea una forma de contraofensiva a la delincuencia organizada, el amarillismo e inseguridad, lo menos que deben hacer las autoridades es respaldar las iniciativas independientes en materia cultural, pues no sólo “Ambrosía” ha sido víctima de la insensibilidad gubernamental actual, hay más ejemplos, como “Detrás del Espejo”, agrupación que fuera hace poco a entrevistarse con el mismo edil Aldo Macías, previo al festejo del “Día de la Mujer 2012”, para solicitarle personalmente un recurso económico simbólico con el propósito de llevar a efecto su programa de actividades para esa ocasión, y a pesar de la confianza de sus integrantes por una respuesta favorable, las palabras del presidente fueron precisas: “aquí no hay recursos para ese tipo de solicitudes vayan con Casamadrid (titular de Fomento y Desarrollo Cultural de Uruapan), a ver que les dice”. Pero eso no es todo, hay valiosos intelectuales, escritores, poetas, artistas y promotores culturales que han decidido mejor alejarse de la cultura, al menos durante este tiempo, tal es el caso de la “Sociedad Amigos del Teatro”, con 50 años de antigüedad, y que hoy dirige el maestro Alejandro Madrigal, igualmente el colectivo “La Vecindad”, que trabaja de forma independiente, dirigidos por Federico Ortíz o el grupo de pintura que tiene el maestro iraní Sccidel o el Taller Escuela MAPECO, el “Grupo Nueva Generación” de la EPLER, “Vuelo Libre”, o los promotores culturales como Edgar Alvarez, Henóc Pedraza, Francisco Ramos, Carlos García, etc. etc. Del mismo modo una gran parte de los promotores culturales de los barrios. En pocas palabras, el concepto de cultura no será el que necesita urgentemente Uruapan, sin la labor de sus protagonistas y de gente sensibilizada con las expresiones artísticas, formativas y culturales, de gente que sin ningún sueldo fijo ni prestaciones era partícipe de su desarrollo y mucho menos si dentro del plan del gobierno del ingeniero Macías Alejandres, están otras prioridades, obra pública, por ejemplo. Por eso, todavía se recuerda que durante muchos gobiernos, antes de dar nombramiento a los funcionarios correspondientes, se dejaba al último al puesto de promociones culturales –hoy fomento y desarrollo cultural- y su regiduría, pues, ¿a quién en Uruapan le iba interesar eso en un gobierno destinado a otros fines? De ello, hay el triste recuerdo. En una ocasión, hace más de diez años, a la titular de la regiduría de cultura, un grupo de pintores, artistas y personas interesadas en dar un homenaje póstumo a Frida Kahlo, se acercaron a la regidora para darle su lugar al gobierno, diciéndole que nunca había tenido un homenaje en esta ciudad a quien fuera esposa de Diego Rivera, a lo que ella, con la mayor seguridad, les contestó abiertamente: -No se preocupen, ustedes nada más díganme dónde vive y yo voy personalmente a invitarla para que se le haga su reconocimiento, estoy segura que si la convenzo”. En fin…/ José Cuevas. |