Asiste y échale una mano al bosque de La Charanda en Uruapan
18:12:15 / 12/06/2013
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URUAPAN, MICH.- Uno de los principales pulmones de oxigenación de Uruapan sin lugar a dudas es el cerro de La Charanda, al norte de la ciudad, donde en los últimos años se ha visto afectados al menos 263 hectáreas por varios factores, principalmente la tala e incendios forestales; por ello, la organización civil denominada Alza la Voz ha tomado la iniciativa de reforestar 10 mil pinos, en una campaña donde se ha invitado a la sociedad, el domingo 23 del presente mes.
Es la segunda jornada de reforestación que llevan a cabo, el año pasado se contó con una participación de mil 700 voluntarios, que plantaron 7 mil pinos, de los cuales sobreviven el 80 por ciento ya que se ha estado cuidando su crecimiento y conservación.
Miguel Ángel y Ma. de la Luz Trejo, así como Sandybell Fernández, representantes de la organización Alza la Voz, dieron a conocer de manera conjunta con Juan Manuel Téllez, representante de Bienes Comunales del barrio de San Juan Bautista; René Cano de Natura México, y César Tadeo del Centro Comunitario de Jicalán, que esperan para este año una participación de más de 2 mil voluntarios y una plantación de más de 10 mil pinos producidos en el vivero del cerro La Charanda.
El punto de partida será a las 9 de la mañana de la esquina de la calzada Benito Juárez y Revolución, donde los organizadores habrán de señalar las áreas a reforestar, tras elaboración de un mapa geográfico; se pretende que cada organización, empresa, escuela, agrupación o familia, sepa el lugar donde quedaron sus plantaciones para que periódicamente esté al cuidado de su crecimiento y conservación.
Juan Manuel Téllez, de Bienes Comunales de San Juan Bautista, dijo que el bosque es el regulador del clima; el bosque genera oxigenación, lluvias y mantiene el medio ambiente sin alteraciones. Es
la fuente de vida y por ello la necesidad de conservar uno de los pulmones con que cuenta Uruapan, junto con el cerro de La Cruz, la montaña del Parque Nacional y el agonizante cerro de Jicalán. |