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Morelia, Mich., a 15 de diciembre de 2014.- Las manifestaciones y bloqueos protagonizados por los grupos de autodefensa este domingo, en donde afectaron el libre tránsito y generaron zozobra entre los ciudadanos de varios municipios, el PRD de Michoacán demanda al gobierno federal y al del estado a garantizar la gobernabilidad y recuperar la tranquilidad en todos los territorios y regiones de la entidad. El presidente estatal del PRD, Carlos Torres Piña, destacó que la inconformidad de las autodefensas demuestra que la estrategia de seguridad federal no ha sido efectiva, y se debe de analizar la viabilidad si la figura del Comisionado Alfredo Castillo sigue siendo útil en estos momentos. El dirigente estatal señaló que se debe reconocer que la Federación ha jugado un papel muy importante en mantener la seguridad en el estado, pero enfatizó que todavía hace falta definir el rumbo, allanar el camino de la paz duradera, de una legalidad a prueba de todo, de la limpieza total de las instituciones, de todo lo que merece la sociedad michoacana. Reiteró que los michoacanos merecen vivir en un ambiente de paz y con tranquilidad, en donde puedan desarrollar sus actividades de forma cotidiana y mantener activa la economía, sobre todo en las festividades de fin de año. Torres Piña dijo también que el PRD está preocupado porque los ciudadanos puedan festejar este fin de año con sus familias y poderse trasladar a todas las regiones del estado de forma libre y sin restricciones, por lo cual es necesario que se garantice la seguridad de la sociedad por encima de todo. Para ello y para garantizar a todos los ciudadanos el Derecho a la Seguridad y asegurar la gobernabilidad, el PRD michoacano presenta las siguientes propuestas: • Establecer de manera inmediata un Plan Estratégico para la Seguridad en las regiones del estado donde operan los grupos de autodefensa. • Prevención Integral del Delito, con estrategias diferenciadas en las ciudades y el medio rural. • Recuperación de espacios públicos, promoción del deporte, el arte y la cultura. • Reconstrucción del tejido social y la legalidad en las regiones, especialmente en la Tierra Caliente, garantizando la participación comunitaria en todos los casos. Una fuerte inversión e impulso de programas sociales. • Atención especial a las víctimas del crimen organizado. • Certificación de los miembros de las corporaciones policiacas. • Cultura de paz y sana convivencia. • Educación en derechos humanos para las autoridades del ámbito estatal y municipal. • Coordinación efectiva entre autoridades policiales para ejecutar acciones, investigaciones, operativos en contra de la delincuencia organizada. |
