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Con más de setenta años a cuestas, con paso lento y cansado por los años, así como algunas mujeres que han quedado viudas, poco a poco se fueron reuniendo sobre la calle Cupatitzio, frente al edificio donde el Senador Jesús Garibay tiene sus oficinas, un grupo de personas de ésta región, el objetivo era manifestarse públicamente y hacer un llamado a los diputados y senadores para que les paguen su dinero, una lucha que lleva varios años. Alma Delia Frayle Barocio, del comité llamado Fobraceros, encabezó la manifestación de más de medio centenar de personas adultas, quienes trabajaron en el vecino país del norte de 1942 a 1960 y que al enviar dinero a México, el gobierno federal les retuvo una parte y que hasta la fecha no les ha reintegrado, se calcula en unos 17 mil trabajadores en Michoacán y unos 3 mil en la región Uruapan, principalmente de la Meseta Purhépecha. Este movimiento de los braceros lleva bastantes años, a grado tal que muchos de los afectados ya han fallecido y son sus esposas o descendientes quienes han continuado en la lucha; se les ha prometido el pago de 38 mil pesos a cada uno, pero hasta el momento, ni la Cámara de Diputados Federal, ni los senadores, han aprobado el presupuesto respectivo. Los braceros, que la mayor parte del tiempo que estuvieron en el plantón, permanecieron sentados, los años y el trabajo han mermado considerablemente su físico y la salud. Tres horas estuvo bloqueada la circulación en la calle Cupatitzio esquina con Morelos, frente a las oficinas del Senador Jesús Garibay, quien brilló por su ausencia. |
