Los diablos de Ocumicho
21:20:40 / 03/07/2016
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OCUMICHO (Charapan), Mich.- Ubicado en el último rincón de la Meseta Purhépecha, esta comunidad indígena está asentada en una empinada ladera que se divide por el barrio de arriba y el de abajo; aunque mundialmente es reconocida como lugar de artesanos o diablitos, es también lugar de topos o tuzas. La mayoría de la población ha emigrado al vecino país del norte, los que se quedaron, se dedican a la artesanía y a la agricultura.
El 29 de junio se conmemora el día del santo patrono, San Pedro, pero debido a que el mismo día se festeja a Pedro y Pablo, el otro apóstol también es venerado de manera solidaria, por lo que hay dos cargueros. La festividad pagano religiosa dura tres días.
Actualmente esta población cuenta con unos tres mil habitantes, es la tenencia más grande del municipio de Charapan, las otras son San Felipe de los Herreros y Cocucho; la mayoría de la población radica en Estados Unidos de Norteamérica, en varias localidades de California se pueden encontrar paisanos de aquí y que emigraron por falta de fuentes de empleo y en busca del sueño americano.
Pero el arraigo, la identidad no la han perdido, aunque sí modos de vida; ahora visten ropa americana como pantalones Levi’s, tenis Nike, usan un Ipone Apple y lucen lujosas “trocas” con placas de California, Tennessi o Miami.
Por ello, regresan en dos importantes fechas al año, una el día de San Pedro y otra en las fiestas de fin de año. Por las inclinadas calles del pueblo se observan circular varios autos y camionetas americanas con música a alto volumen. Son los emigrados que han venido a la fiesta y a visitar a sus amigos y familiares; los mayores son trilingües, hablan el español, la lengua materna que es el purhépecha y algo de inglés, lo que aprendieron para “defenderse”.
Aparte de las autoridades civiles, en este caso los jefes de tenencia J. Jesús Sánchez y Gilberto Zamora, se nombra un cabildo o los Tatá K’eris, encabezado por Anacleto Elías Jacobo, Enrique Ortiz Alonso y
Everardo González Julián, quienes son la máxima autoridad para las festividades patronales.
Misas, confirmaciones, danzas, artesanías y música de bandas de viento y por la noche bailes populares, durante la festividad de San Pedro le dan ese toque pueblerino, donde las tradiciones se conservan desde hace siglos, donde muchos estrenan ropa y zapatos. La mayoría de las mujeres de Ocumicho aún conservan la vestimenta tradicional, con rollo, delantal y blusa bordados a base de punto de cruz y lentejuelas y los lucen con orgullo.
La mayoría aún conservan la lengua materna, el purhépecha; muchos se dedican a la elaboración de máscaras de madera, alebrijes o nacimientos, así como los famosos diablitos. Zenaida Rafael es una de las que ha obtenido muchos premios regionales, estatales y nacionales.
Los cargueros en esta ocasión fueron Marcos y su hermana Rosa González Esteban, por parte del San Pedro, mientras que por San Pablo, Antonio Benito Cruz e Isabel Elías Zacarías; los padrinos y ayudantes, ofrecen comida y bebida a los visitantes. El tradicional churipo que aquí lo acompañan con albóndigas, y claro, las corundas de cinco picos con queso en el centro.
Tatá Pedro Simón Pozas es una persona de mucho respeto en la comunidad, a pesar de no tener estudios, muchos le consultan sobre varios temas, dice que la vida le ha enseñado mucho; calcula que al menos unas 300 ocasiones le ha tocado ir a pedir perdón cuando algún joven o tumbí, se roba a la muchacha y además ha participado en los preparativos prenupciales.
Antonio Zacarías es el padrino del carguero del santo patrono, San Pedro, por lo que también hicieron churipo y corundas que sirvieron en largas filas de mesas en la calle, mientras tanto, el grupo musical Reconquistador de Esteban Cruz Ramos, interpretaba varios sonecitos y pirekuas; dijo que el famoso Toro Pinto, se dio a conocer hace años en la comunidad de Zacán, pero fueron ellos quienes le pusieron letra.
Cuando grabaron ese tema, era el grupo Conquistador; la letra fue de Amalio Caballero y de su madre Enedina Pascual. Hasta la fecha, este tema sigue siendo un icono de la raza purhépecha.
En tanto, el vocalista del grupo lee una larga lista de nombres en el que dice, se agradece a los que aportaron su cooperación para la fiesta y que radican en los Estados Unidos de Norteamérica; además de los nombres, dice el lugar donde residen, la mayoría en California.
Luego de la comida, los asistentes a la casa del padrino, cargan con las ofrendas, canastos y chiquihuites con pan o frutas de la temporada, la multitud empieza a caminar lentamente hacia casa del carguero y al final la banda de música que va entonando algunos abajeños; pasan por los cargueros y luego enfilan hacia el atrio en donde se habrá de repartir las ofrendas entre los asistentes a la iglesia.
La imagen de San pedro y San Pablo, en el interior del templo, con varios obsequios, milagros, fotos, pero mayormente billetes de dólares americanos, aunque sean de solamente un dólar; San Pedro, el santo patrono, recibe la mayoría, su compañero, San Pablo, un poco menos, casi para no dejarlo solo y en solidaridad, comentan los visitantes.
Fue un día soleado, a diferencia del año anterior que cayó fuerte aguacero, ahora hubo tiempo para asistir al concurso artesanal, la misa, escuchar las bandas, probar el churipo con carne y albóndigas, de escuchar el Toro Pinto con Reconquistador. Por la noche, baile popular con diferentes organizaciones musicales.
Aparte de los emigrados, los que aquí se quedan se dedican a la artesanía, a la agricultura propia o se alquilan para los plantíos de la región de Tangancícuaro y Zamora, donde se cultiva la fresa, papa y coles; otros más, a la música, existen unas seis bandas de viendo y otro tanto de grupos musicales modernos.
Pero la tierra sigue siendo el principal elemento para el cultivo de maíz, frutales y hortalizas; la tierra de barro es moldeada con las manos mágicas que poco a poco van dando forma de diablos, de acuerdo a la imaginación del artesano. El significado de Ocumicho, según los que saben, es lugar de tuzas o topos. |