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NURÍO (Paracho), Mich.- Que bonito es lo bonito. La comunidad entera disfrutó, convivió y bailó en su gran fiesta patronal que culminó con un espectacular jaripeo ranchero y la música country y chicana del internacional grupo de Los Felinos en una plaza que estuvo a reventar. El Dios Tláloc tal vez estaba enfurecido y dejó caer un torrencial aguacero por casi una hora previo al jaripeo que auguraba la suspensión, sin embargo, a la llegada del grupo de Los Felinos al escenario, todo cambió, las negras nubes desaparecieron y el público, jinetes, empresarios, bueno, creo que hasta los toros se alegraron. La gente jaripeyera escuchó, cantó y se deleitó con las canciones que hiciera éxito el Paysa Maldonado y que siguen en el gusto del respetable; buenos recuerdos para muchos sin lugar a duda. Pidieron más y más temas que fueron complacidos a los miles de espectadores que llenaron la plaza y una loma del cerro. En el ruedo, el Tily López animaba a los jinetes que llegaban al cajón de los sustos; buenos toros de Quique Solórzano y de Macario Bravo de Angahuan. Los premios fueron en efectivo y una gran fiesta al ser entregados a los intrépidos montadores; Los integrantes de Los Felinos fueron reconocidos públicamente con un presente. Fue una magnífica actuación de Los Felinos del Paysa Maldonado que dieron muestra de seguir siendo los consentidos en la región de la Meseta Purhépecha; que su música sigue estando en los corazones de miles y miles de fanáticos que les demuestran su cariño en cada una de las presentaciones. Al final, el reconocimiento no se hace esperar, los saludan, les piden autógrafos, posan para las fotografías y les desean toda la suerte del mundo para que sigan por ese camino del éxito y sigan llevando la música que por varias generaciones han sido el deleite de muchos. Se dieron cita a este evento gente de varias comunidades de la región. Por la noche la fiesta continuó en la plaza del pueblo, con un espectacular baile que culminó hasta altas horas de la noche. |
