Este 2 de diciembre de 2024 se cumplen 50 años de la muerte del prócer Lucio Cabañas Barrientos. Maestro normalista, nacido en las zonas más pobres del estado de Guerrero.
08:51 AM 06/12/2024
Por Juan Pérez Medina.
Este 2 de diciembre de 2024 se cumplen 50 años de la muerte del prócer Lucio Cabañas
Barrientos. Maestro normalista, nacido en las zonas más pobres del estado de Guerrero,
dominada por caciques, terratenientes y políticos priistas, que imponían a los campesinos
y trabajadores los peores sufrimientos y abusos. Para lograrlo se valían de grupos de
paramilitares armados que con la venia de los gobiernos en turno imponían su voluntad en
el territorio.
Nació el 12 de diciembre de 1937, de acuerdo con la afirmación de su hermano Pablo, en la
comunidad del porvenir, en el estado de Guerrero. Por cuenta propia, al cumplir los 17 años
abandona la casa de sus tíos donde vivía para llegar a la Escuela Normal de Ayotzinapa en
el municipio de Tixtla de Guerrero. Ingresó a sexto grado del grupo complementario de la
escuela normal, para luego incorporarse a la secundaria, hasta convertirse en maestro a la
edad de 27 años. En una placa que se encuentra en dicha institución educativa se lee
“Generación 1957-1963” y los nombres de los estudiantes que la integraron, incluyendo el
de Lucio Cabañas Barrientos.
El maestro lucio fue un destacado estudiante qué rápido se convirtió en guía para sus
compañeros. Su origen campesino y humilde lo hicieron acercarse rápidamente a la teoría
marxista por medio de folletos revistas y libros que llegaban a la normal de Ayotzinapa de
manos de algunos maestros. Su encuentro con Carlos Marx le ayudó a entender de mejor
manera la realidad social en la que vivían los campesinos de su entorno. Esto lo llevó a
ingresar al partido comunista y a participar en la lucha contra la tiranía del generalCaballero
Aburto, entonces gobernador del estado. Cabe mencionar, que en esta lucha también
participó de manera destacada el profesor y también guerrillero Genaro Vázquez Rojas, en
aquel entonces dirigente de la Asociación Cívica Guerrerense (ACG).
Fue dirigente de la Federación de Estudiantes Campesinos y Socialistas de México (FECSM),
organización estudiantil representativa de las escuelas normales rurales del país que se
fundó en 1935 en la Escuela Normal Rural de Roque Guanajuato. En 1961, en el congreso
llevado a cabo en la Escuela Normal de La Huerta Michoacán es electo como secretario
general con un voto por encima de Antonio Valtierra Limones, quien no reconoció su triunfo,
originando una división al interior de la FECSM, que no fue motivo para detener la lucha de
los estudiantes de las escuelas normales del país.
Ya como maestro, en 1963, fue adscrito a la escuela primaria “Plan de Ayala” de la
comunidad Mexcaltepec, municipio de Atoyac, Guerrero. Allí inicia su desempeño como
maestro, destacándose por su forma de tratar a sus alumnos y a la misma gente de la
comunidad, diferenciándose de los anteriores maestros por su trato amable y humano. De
acuerdo con las opiniones de algunos de sus alumnos que fueron entrevistados por la
investigadora Eneida Martínez Ocampo, con la llegada de Lucio Cabañas a la escuela “Plan
de Ayala”, “dejaron de haber golpes, maltratos, castigos humillantes”.
Eva Mesino Martínez, quien fue una de sus alumnas, platicó de Lucio: “Nos daba consejos
él, que le echáramos ganas para que mañana fuéramos una persona que valiéramos”. Rosa
Ocampo Martínez, recuerda que lo apreciaban tanto que sus alumnos lo iban a visitar a la
Casa del Maestro, donde se quedaban los maestros que no eran de Mexcaltepec. Erasmo
Cabañas Tavares –niño zurdo– ya no fue amarrado de su mano izquierda para seguir
escribiendo con la mano derecha como lo hacían los otros maestros: “Mi papá le dijo a Lucio:
‘Oye, amárrale la mano’; dice [Lucio]: ‘No, yo no tengo por qué amarrarle la mano; él va a
escribir con la mano que él puede y quiere’ […]. Me dio oportunidad de escribir con la mano
zurda”.
“Cabañas no sólo dejó una buena impronta en la memoria colectiva de las alumnas y
alumnos de la primaria Plan de Ayala, sino que también marcó su distancia con aquella
enseñanza tradicionalista que empleaba el castigo físico y psicológico para disciplinar y
controlar a los estudiantes”.
Pero al mismo tiempo que desempeñaba sus labores educativas, lucio participaba con el
pueblo en reuniones y acciones pacíficas de protesta en contra de las compañías
madereras que habían incumplido con los contratos firmados con los campesinos, en los
cuales se comprometían a aperturar brechas a cambio de la explotación de los bosques.
Los ejidatarios y Cabañas bloquearon con troncos de árboles del paso hacia Mexcaltepec,
logrando expulsar a los madereros de esa zona.
Por este motivo, la SEP removió a Lucio a otra escuela del centro de Atoyac; a donde acudían
hijos de campesinos, obreros, artesanos. Lucio chocó de inmediato con la manera
tradicionalista y autoritaria de conducir la escuela de parte de la directora Genara Reséndiz
de Serafín, quien cobraba cuotas obligatorias a los padres de familia.
Al interior de esa escuela se un grupo de maestros militantes de izquierda, algunos
formaban parte del PCM, de la Central Campesina Independiente, y provenían de las
normales rurales que tenían una larga tradición de lucha, entre ellas la de Ayotzinapa,
quienes enfrentaron la situación de la escuela hasta lograr la remoción de la Directora.
Por estos hechos la SEP envió a Lucio Cabañas y su compañero maestro, Serafín Núñez al
poblado de Tuitán perteneciente al municipio Nombre de Dios del estado de Durango. Allí
reinició sus actividades escolares. Pero su compromiso social lo llevó de inmediato a
reunirse con los pobladores más necesitados a los cuales organizó contra los abusos de los
más poderosos, involucrándose en la lucha en contra de que el hierro saliera a otros estados,
ya que las concesiones no les pertenecían a los duranguenses, al igual que su usufructo.
Al siguiente año, por presiones de sus compañeros maestros de Atoyac y con las gestiones
del gobernador de Durango, que quería fuera a los maestros Lucio y Serafín, éstos
regresaron a Guerrero.
Fue a su regreso que Lucio dinamizó su trabajo político y organizativo en el seno del pueblo
campesino. Como maestro de la escuela primaria Juan Álvarez, ubicada en el corazón de
Atoyac y a petición de los padres de familia organizó un comité de lucha para sacar de la
dirección de la escuela a la directora Julia Paco Pizá, quien exigía por cada padre de familia
una cuota de 3 pesos mensuales y 10 pesos anuales por la inscripción. Tuvieran o no dinero,
tenían que pagar. “En el fondo, el conflicto (1967) que se desató en esta escuela fue, en
esencia, la confrontación de dos clases sociales: por un lado, se encontraban los
campesinos sobreviviendo de sus cosechas, los indígenas trabajando como peones, los sin
tierra, etcétera; por otro lado, estaban los caciques, acaparadores de cosechas y
rapamontes”.
Con el apoyo de los maestros de la escuela Mod
A través de la Dirección de Vinculación y Servicio Social se llevó a cabo la conferencia “El negocio perfecto: Cómo crear e-Commerce rentable y escalable” dirigida al alumnado.
La Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE), Secretaría de la Defensa Nacional (DEFENSA) y Guardia Civil (GC), aseguraron en Tuzantla un vehículo que contenía en su interior droga, equipo táctico, armas y diversos objetos.