Reforma Laboral primer éxito de Beltrones en San Lázaro; segundo, toma de protesta de Peña Nieto

Fue desde la primera etapa de revisión en la Cámara baja cuando el PRI estuvo a la cabeza de las “mejorías” que los diputados hicieron a la iniciativa preferente del presidente Felipe Calderón

Aunque quedará registrado en el anecdotario que el presidente de la Comisión del Trabajo, el priista Aceves del Olmo casi pierde esta batalla cuando el bloque de las izquierdas, al que se unió el PAN, propuso modificaciones para ponerle camisa de fuerza a los sindicatos, en un momento en que en la comisión dictaminadora había más legisladores de izquierda que priistas.

Entonces “se le cayó el sistema”, repentinamente sintió malestar el diputado presidente de la Comisión por “exceso de trabajo” y la sesión se suspendió. Al día siguiente la fuerza del PRI se volvió a imponer.

Sí se mejoró la reforma de Calderón

Con todo y el juego político del PRI para ser el partido eje que delineó la columna vertebral de la Reforma Laboral; en el contenido de ésta, Beltrones Rivera sí logró incluir los equilibrios necesarios para no reventar el sistema obrero-patronal, ni ahorcar a los sindicatos.

Que finalmente, aun con las cuestionables actuaciones de algunos dirigentes sindicales, estos organismos siguen siendo el medio de defensa más efectivo de los trabajadores ante la rapacidad de los patrones o contratistas.

Finalmente este jueves el pleno de la Cámara de Diputados aprobó la reforma laboral en los términos en que había coincidido el PRI. El bloque PRI, Panal y PVEM se impuso al de las izquierdas, apoyado a medias por el PAN.

Quedaron fuera los apartados 388 BIS y 390 que permitían que los trabajadores decidieran qué sindicatos los representarán para firmar la titularidad de los contratos colectivos y el registro de los mismos ante la Junta Federal o Local de Conciliación y Arbitraje.

Tampoco se aceptaron las modificaciones al 371; por lo que se incluyó la votación indirecta en el caso de la elección de las dirigencias sindicales y se anuló del artículo 373 el párrafo que obligaba a las directivas entregar a los trabajadores resumen de ingresos por cuotas sindicales y otros bienes, dentro de los diez días siguientes de cada periodo de rendición de cuentas.

Esta reforma laboral que se turnó al Senado y de la que se aprobó, asimismo su envío al ejecutivo para su promulgación, representa el primer gran éxito de Manlio Fabio Beltrones, pues la directriz la definió el PRI.

Advertencia del 1 de diciembre

Ante la aprobación de la reforma laboral al gusto del PRI, el bloque de la izquierda: PRD, PT y MC advirtió en la sesión de este jueves que se impedirá que el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, rinda protesta en San Lázaro el próximo 1 de diciembre.

Ánimos que tendrá que serenar el coordinador priista, Manlio Fabio Beltrones para poder garantizarle al mandatario federal próximo, que la ceremonia será institucional y hasta solemne, sin escándalos que dañen la imagen del mexiquense en nuestro país y el extranjero.

Un reto un tanto complicado cuando la izquierda se siente relegada, primero porque quedaron fuera los cambios que propuso para “mejorar” la reforma laboral; y segundo, porque en la Junta de Coordinación Política que preside el panista Luis Alberto Villarreal, se desechó la creación de la comisión especial para el caso Monex.

Ante lo cual, la izquierda ha sido reiterativa en eso de que no será amigable con Peña Nieto el 1 de diciembre; en que no será un día de campo para el mexiquense, y los más radicales han adelantado que impedirán la toma de protesta del presidente electo en la Cámara de Diputados.

Reforma Laboral primer éxito de Beltrones en San Lázaro; segundo, toma de protesta de Peña Nieto

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