A bocajarro, la columna política

Faltarle el respeto a Michoacán.- Sabe usted estimado lector qué es o qué contiene el “Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria” (DNSP) seguramente que ya más o menos le di alguna idea de lo que en esta ocasión analizaremos. Un tema muy alejado de la vida política nacional es el de las cárceles, ya que no es muy atractivo publicitariamente hablando; bueno pues en días previos se dará a conocer un muy importante diagnóstico acerca de la situación que priva en estos centro de reclusión en el país.

Me encontré con una interesante investigación que desde hace años la revista Proceso ha venido publicando en torno a este “infierno” que tiene que soportar quienes ahí llegan por diversos delitos. Las cárceles en México no son nada diferentes a las de otras latitudes en cuanto al mal trato, humillación, sometimiento, violencia, drogadicción, asesinato y lo peor de todo es que todos estos “pecados” son solapados, promovidos, protegidos y fomentados por la corrupción gubernamental que padecen.

Es más el propio Julio Scherer escribió una muy interesante obra en torno a esta grave problemática social que se quiere desde el poder intencionalmente ignorar o satanizar para evitar seguramente su debida y urgente transformación. “Los hombres perdidos” es parte de esa cruda realidad del sistema penitenciario mexicano en donde el castigo cruel e inhumano llevado a cabo ya sea desde los propios liderazgos que se construyen desde adentro, hasta el que realizan las propias autoridades en contra de quienes osan retar o denunciar semejantes atrocidades.

“Cárceles se publicó hace 16 años y desde entonces hasta la fecha, pareciera que nada ha cambiado más una sola cosa, la entrada al capital privado para la edificación de nuevos CEFERESOS.

Sabía usted que el propio gobierno viola nuestra sagrada Constitución Federal-algo muy común por cierto-pues el artículo 18 establece como objetivo central “la reinserción” sustentada ésta en cinco elementales principios: trabajo, educación, capacitación para el trabajo, salud y deporte”

Desde el 2006 según un estudio que realizó sobre la situación en las prisiones la CNDH sentenció que “estas no cambian” Según el DNSP la mayoría de estos centros primeramente estatales en cuanto a condiciones de gobernanza obtienen un 5.68, un 6.08 en aspectos que garantizan la integridad física y moral del interno, 6.45 en estancia digna, 6.63 en reinserción social y 6.73 en atención a grupos vulnerables en reclusión.

Usted seguramente estará de acuerdo que el que esta en una cárcel “no es una blanca palomita” todos aquellos quienes de una u otra manera somos víctimas de la delincuencia queremos el peor de los castigos para quien se atrevió a alterar nuestra alterada vida. En eso estoy de acuerdo pero no debemos olvidar que todos estamos “en la casa del jabonero” y entonces resulta injusto que pensemos más en el “brutal castigo” que en exigirle a la autoridad mayores y más eficaces resultados en materia de empleo y

oportunidades. Es indignante que haya procesados o hasta sentenciados por haberse robado un gansito, mientras que tenemos que soportar a los cínicos políticos que cometen grotescos desfalcos muy tranquila e impunemente ya sean presidentes de la república, gobernadores o ediles en contubernio con Congresos Locales o cabildos.

Cada vez habrá necesidad de más y más reclusorios si no frenamos este fatal camino que llevamos en materia económica, hoy en México hay 418 penales de los cuales 403 son estatales y 15 federales, 3 son de máxima seguridad. El número de procesados y sentenciados adultos ronda los 250 mil, lo que equivale a que en este suelo nacional hay un preso por cada 473 habitantes.

Pero no todo es desgracia-bueno me refiero a unos cuantos que siempre les sonríe la fortuna-y es que no es para menos pues las cárceles ya también serán negocio de particulares, ello contraviniendo tratados internacionales y a la propia Constitución. Carlos Slim, Olegario Vázquez Raña y las familias Hank Rhon y Quintana serán algunas de las beneficiarias al invertir en ramo donde ahora los internos serán utilizados como productos y no como personas.

Y para deleite de los ambiciosos inversionistas privados, cada año aumenta la población penitenciaria, según un artículo que cita la revista PROCESO 1972 del 17 de agosto de este año “Cárcel de Apodaca: haciendo leña del árbol caído” (revista penal, agosto 2012), Barrón da las siguientes cifras: “En 1992 había 101 presos por cada 100 mil habitantes; luego, en 1996, la cifra ascendió a 102; una década después, en 2006, era de 200 presos, y para 2010 era de 206”. No todo pues se “mueve para avanzar”

A QUEMARROPA

1.-Con más dudas que certezas el recién creado Consejo Económico y Social para Michoacán quedó ya integrado y presentado formalmente ante la prensa. Salvo un “pequeño” obstáculo que tuvieron que sortear los “brillantes” diputados Fidel Calderón, Alfonso Martínez, Silvia Estrada, Sergio Benitez, Antonio Sosa, Bertín Cornejo y Olivio López, y del cual pudieron salir “airosos” del juicio de amparo que promovió el inquieto ex diputado perredista Enrique Bautista. 2.- Si hacemos caso a esa invitación que nos hizo muy sentidamente el empresario moreliano Adrián Huerta de que “Toca a los michoacanos resolver muchos de los problemas que prevalecen” Pues para muchos que por “angas o magas” no se inscribieron en la convocatoria que solo tres periódicos-mediante jugoso pago- publicaron, dichos consejeros distan en varios de los casos de conocer más allá de Camelinas o Costco. Y si se ha puesto a Michoacán en manos de estos “afortunados” ciudadanos pues creo que ya nos llevó el carajo. 3. Pero no todo termina ahí estimad lector, en cuanto a las 10 regiones, pues ya será en otra entrega. Escúchanos todos los días de 10 a 11 de la mañana en la 100.1 de fm en Radio Tormenta BRAVOXLARED o en www.aimich.org Este 1 de octubre 2º Aniversario.

A bocajarro, la columna política

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